Cuando te conocí no pude rechazarte. El miedo a salir mal lo eché para otra parte. Por ti volví a sentir, todo nos sonreía. Si diera marcha atrás caería una vez más. Porque sólo me dejaste descubrir una mitad. Y esa otra tan idiota te hace callar. No puede ser, que van pasando los días y más pesa tu querer. Ese querer de puntillas que no pienso retener. No sé vivir a escondidas. Nos dimos lo mejor los seis primeros meses, nada me costó decírselo a la gente. Luego empecé a notar, no me correspondía. \"Es una amiga más\