Traje los cuadros a la bella ciudad de París con profunda tristeza por mi Chile. Todos mis amigos vinieron al puerto para acompañarme cada uno llevaba en sus manos todas mis cosas. Y cuando llegamos sobre el agua danzaba la nave y cuando apareció un pañuelo blanco yo sonreí. Al fin estoy en París camino cerca del Sena y sobre el puente del Louvre mi corazón llora. Estoy ya en la oficina cara a cara con la secretaria cuando escucho un timbre que me llama. En seguida vi delante de mí al capitán del museo era muy gentil el señor Faró Ah no es cierto Ivonne?.